En un lugar situado en lo que ahora es el lago Turkana en Kenia, hace más de un millón de años, dos especies diferentes de homínidos pudieron haberse cruzado mientras buscaban comida en la sabana caliente repleta de vida silvestre. Según los científicos, esto se debe a los fósiles desenterrados que representan el primer ejemplo de dos conjuntos de huellas de homínidos hechas aproximadamente al mismo tiempo en una antigua orilla del lago. Esta descubrimiento proporcionará más información sobre la evolución humana y cómo las especies cooperaron y compitieron entre sí.

¿Qué pasó?

Los investigadores encontraron pruebas sólidas de que diferentes especies de homínidos vivieron contemporáneamente en tiempo y espacio, superponiéndose mientras evitaban depredadores y enfrentaban los desafíos para asegurar alimentos en el paisaje africano antiguo. Los homínidos pertenecientes a las especies Homo erectus y Paranthropus boisei hicieron las huellas, según los investigadores.

¿Dónde ocurrió?

Los fósiles fueron descubiertos en una rica zona de fósiles en el norte de Kenia, cerca del lago Turkana.

¿Cómo ocurrió?

El equipo de investigación aplicó métodos de estratigrafía y datación para demostrar la antigüedad geológica de los fósiles hace 1.5 millones de años. También interpretaron el entorno deposicional de la superficie de las huellas, mostrando que se formaron en el lugar exacto donde se encontraron.

¿Por qué es importante?

Estas huellas son significativas porque caen en la categoría de “fósiles de rastro”, que pueden incluir huellas, nidos y madrigueras. Los fósiles de rastro ofrecen evidencia de comportamiento, lo que arroja luz sobre cómo estas especies interactuaron cultural y reproductivamente. Además, las huellas proporcionan una visión detallada de la anatomía y locomoción humanas de hace millones de años.

“Con este tipo de datos, podemos ver cómo los individuos vivos, millones de años atrás, se movían en sus entornos y potencialmente interactuaban entre sí, o incluso con otros animales. Eso es algo que realmente no podemos obtener de los huesos o las herramientas de piedra” – Kevin Hatala

Este descubrimiento aporta una nueva comprensión sobre la evolución humana y el papel de la cooperación y la competencia en nuestro viaje evolutivo. Demostrar que dos especies diferentes de homínidos caminaban en la misma superficie literalmente dentro de horas el uno del otro es un logro sin precedentes en el campo de la paleontología.