Los pulpos de la costa sur de Israel han formado un vínculo fascinante con la población local de peces, y ahora las dos especies se han unido para rastrear presas. Esta extraña colaboración ya ha demostrado ser beneficiosa para cada criatura acuática, permitiéndoles cazar de manera más efectiva de lo que podrían hacer solos.

La Alianza de Caza Impensada Entre Peces y Pulpos

Los pulpos normalmente cazan solos, lo que hace que esta nueva investigación sea aún más sorprendente. Sin embargo, las pruebas en video capturadas por buceadores en la costa de Eilat, Israel, muestran una prueba irrefutable de esta táctica de caza. Los resultados del nuevo estudio fueron publicados en Nature Ecology & Evolution, resaltando la notable adaptación social de todas las especies involucradas.

“El pulpo básicamente actúa como el decisor del grupo,” dijo el autor principal del estudio, Eduardo Sampaio, a Nature News. “Hay indicios de que está ocurriendo algo de cognición aquí, sin duda.”

Sampaio señaló que investigaciones anteriores identificaron que a veces se veía a los pulpos buscando alimento junto a los peces, pero la naturaleza exacta de esa relación no estaba clara.

Ahora, sin embargo, con 120 horas de metraje a su disposición, Sampaio y sus colegas han podido observar y documentar cómo se desarrolla esta dinámica social fascinante. En sus grabaciones, capturaron 13 instancias de caza grupal entre pulpos grandes azules (Octopus cyanea) y diferentes especies de peces. Normalmente, estos grupos de caza se alimentaban de moluscos o peces más pequeños.

Sampaio explicó a NPR que antes de este estudio, los investigadores asumían que los pulpos hacían la mayor parte del trabajo y que los peces cercanos simplemente comían restos. Sin embargo, parece que la situación es mucho más compleja.

“Inmediatamente entendí que estos grupos no solo seguían al pulpo porque claramente se podía ver que se movían en un patrón de parada y avance,” dijo Sampaio. “Y una vez que ocurre esta parada, siempre hay peces que comienzan a buscar presas.”

Resulta que los peces no siguen a los pulpos con la esperanza de atrapar presas sueltas; en realidad están explorando la región en busca de los pulpos y reportando de vuelta a ellos.

“Los peces exploran el entorno,” dijo Sampaio. “Encuentran la presa. Y luego el pulpo elige entre las opciones que los peces le dan, y se mueve allí, desalojando a la presa. Luego, todo el grupo se mueve con el pulpo.”

De hecho, hay cierto ironía en las suposiciones anteriores de los investigadores de que los peces estaban aprovechándose del pulpo, ya que esta nueva investigación deja en claro que la holgazanería no es tolerada en estos grupos.

Los Pulpos No Toleran Aprovechadores en sus Grupos de Caza

Las cacerías grupales son beneficiosas tanto para los pulpos como para los peces que los acompañan, especialmente porque permiten a los peces rastrear presas que normalmente no podrían perseguir sin brazos para sacar la fuente de comida de grietas en rocas y arrecifes. Sin embargo, cualquier pez que espere quedarse atrás y dejar que otros hagan todo el trabajo mejor pensará de nuevo.

Durante sus observaciones, Sampaio y sus colegas notaron que los pulpos golpearían a los peces si no estaban contribuyendo o intentaban colgarse del grupo. En particular, notaron este comportamiento con los meros de aleta negra que esperaban regularmente a un lado, con la esperanza de tomar un bocado sin poner el esfuerzo.

Sampaio también observó que los pulpos golpearían a los peces si el grupo de caza se quedaba quieto por demasiado tiempo. “Y luego esto crea más movimiento en el grupo, y luego el pulpo deja de golpear.”

Interesantemente, los peces nunca atacaron de vuelta al pulpo, como si tuvieran la comprensión de que si el pulpo se alejara, entonces ellos, a su vez, tendrían menos que comer. Sampaio también expresó interés en estudiar si los pulpos son capaces de reconocer a peces individuales que han exhibido previamente rasgos oportunistas.

Aún así, la nueva investigación está cambiando rápidamente las opiniones de los investigadores sobre la capacidad de los peces de participar en escenarios sociales entre especies.

“Este tipo de dinámicas muy complejas que pensamos solo se desarrollan en sociedades complejas,” dijo Sampaio, “podemos encontrarlas en la naturaleza, incluso entre animales que no están relacionados.”

Después de leer sobre este fascinante nuevo estudio sobre la colaboración entre pulpos y peces, conoce al pulpo Dumbo, la criatura de aguas profundas con aletas similares a orejas de elefante. Luego, descubre al astuto pulpo coco.